Apagaste la luz, e iniciaste la retirada.
Cuando no queda nada para decir.
Cuando no queda nada para agregar.
Cuando el dolor lo inundo todo, completamente todo.
Cuando el dolor dio paso a la vida.
Cuando el dolor te libera.
Y cerraste la puerta.
De un portazo y sin adiós.
Cuando no queda nada para decir.
Cuando no queda nada para agregar.
Cuando el dolor lo inundo todo, completamente todo.
Cuando el dolor dio paso a la vida.
Cuando el dolor te libera.
Y cerraste la puerta.
De un portazo y sin adiós.
2 comentarios:
Y así se va el año de un portazo, hasta uno podría decir que no fué tan malo de lo breve que fue
Don: lo breve si bueno... ¿dos veces bueno?... capáz!
Publicar un comentario